Síntomas de la fiebre del heno

Síntomas

Enfermedades y sus síntomas

Los sintomas de la fiebre del heno incluyen estornudos, goteo nasal, nariz tapada, tos, ardor en los ojos, picor de nariz, picor de garganta, círculos oscuros bajo los ojos, frotar la nariz, irritación nasal, ojos llorosos y conjuntivitis entre otros.

Imagen de la fiebre del heno

Esta página intenta proporcionar una lista con información de algunos de los posibles síntomas de la fiebre del heno. Ten en cuenta que los síntomas de la fiebre del heno pueden variar de forma individual en cada paciente y podrían no presentarse de la misma forma o incluso no manifestarse en todos los casos de fiebre del heno.

Información general acerca de los síntomas de la fiebre del heno

Esta información sobre síntomas ha sido obtenida de diversas fuentes y puede no ser totalmente exacta y tampoco tiene porqué ser la lista completa de los síntomas de la fiebre del heno. Debes consultar con tu médico si notas los primeros síntomas de la fiebre del heno ya que sólo tu médico puede proporcionar un correcto diagnóstico de los síntomas de forma precisa.

La fiebre del heno es una reacción alérgica. Es la respuesta de nuestro sistema inmune para los materiales extraños que se encuentran en el aire que respiramos. Usualmente la fiebre del heno se refiere a las alergias provocadas por los cuerpos en suspensión al aire libre, como podría ser el polen y el moho.

¿Qué provoca la fiebre del heno?

La fiebre del heno, al igual que todas las reacciones alérgicas, es causada por alérgenos, extraños "invasores" que entran en nuestro cuerpo a través de la inhalación, la ingestión o por el contacto con nuestra piel.

En el caso de la fiebre del heno, los alergenos son sustancias suspendidas en el aire que entran en nuestro organismo por las vías respiratorias (boca, nariz, garganta y pulmones) a través de la respiración y a veces por un contacto directo con el revestimiento de los ojos y de los oídos.

La mayoría de las veces es difícil identificar un alergeno específico.

Una vez que estos alergenos entran en contacto con las vías respiratorias, los glóbulos blancos de la sangre de nuestro sistema inmune comienzan a producir anticuerpos para luchar contra la sustancia nociva. A menudo, a esta reacción exagerada frente a una sustancia inocua o inofensiva se le llama reacción de hipersensibilidad.

  • El anticuerpo, llamado inmunoglobulina E o IgE, se almacena en unas células especiales llamadas mastocitos o células cebadas.
  • Cuando el anticuerpo se pone en contacto con el antígeno correspondiente, promueve la liberación de unos productos químicos y hormonas llamados "mediadores". La histamina es un claro ejemplo de mediador.
  • Los efectos de estos mediadores en los órganos y de otras células son los causantes de los síntomas de la reacción alérgica, en este caso, de la fiebre del heno.

Los alergenos más frecuentes de la fiebre del heno son los pólenes.

  • El polen está formado por pequeñas partículas liberadas por las plantas con flores.
  • Este se traslada a otras plantas de la misma especie gracias al viento. Este movimiento hace que éste fertilice la planta para que pueda florecer de nuevo.
  • El polen de ciertos tipos de árboles, hierbas y malezas (como la ambrosía) son más propensos a causar reacciones alérgicas. El polen de otros tipos de plantas son menos alergénicos.
  • La época del año en la que una especie de planta en particular libera polen o "poliniza" depende del clima local y de lo que sea normal para esa especie.
  • Algunas especies realizan su polinización en primavera y otras a finales del verano y a principios del otoño.
  • En general, cuanto más al norte esté situada una planta, más tarde será su temporada de polinización.
  • Las variaciones en la temperatura y en las precipitaciones de un año al otro afectan en la cantidad de polen que hay en el aire en cualquier temporada.

Otro de los alergenos comunes de la fiebre del heno es el moho.

  • El moho es un tipo de hongo que no tiene tallos, raíces ni hojas.
  • Las esporas del moho flotan en el aire como el polen hasta que encuentran un ambiente adecuado en el que crecer.
  • A diferencia del polen, el moho no tiene una temporada determinada. Está presente durante todo el año en la mayor parte de Estados Unidos.
  • El moho crece tanto en exteriores como en interiores.
  • En el exterior, se puede desarrollar en el suelo, en la vegetación y en la madera podrida.
  • En el interior, el moho (se le conoce comúnmente como hongos) vive en lugares donde el aire no circula libremente, como los áticos y los sótanos, lugares húmedos, como los cuartos de baño y los lugares donde los alimentos están almacenados, preparados o desechados.

Las cantidades de polen y de moho en el aire son controladas a diario en muchas zonas y comunicadas a la Oficina Nacional de la Alergia.

  • Los recuentos de polen y de moho entre las personas desarrollan síntomas alérgicos varían mucho de persona a persona.
  • Los recuentos de polen y de moho no son muy útiles para predecir cómo una persona determinada va a reaccionar frente a ellos.

Los factores de riesgo para la fiebre del heno

  • Miembros de la misma familia con fiebre del heno
  • La exposición repetida al agente alérgeno
  • Padecer otras condiciones alérgicas como el eccema o el asma
  • Los pólipos nasales (pequeños crecimientos no cancerosos en el revestimiento nasal)

Los síntomas provocados por los agentes alergénicos, en algunas personas alérgicas pero no en todas, tienden a disminuir a medida que éstas crecen.

Los cambios corporales causados por el embarazo pueden hacer que la fiebre del heno empeore.

Lista de los síntomas de la fiebre del heno

La lista de los principales síntomas de la fiebre del heno, obtenidos de varias fuentes, incluyen: